Creo que los cuentos de Etgar Keret son lo más cercano a si se transcribieran nuestros sueños más locos, irónicos y hasta cierto punto cómicos sobre situaciones cotidianas. Son tan sencillos que podrías sacar varías interpretaciones de los mismos. No son cuentos largos, serios o muy simples, tal vez por lo mismo pueden mantenerte entretenido.
Es uno de los libros más deprimentes que he leído. Habla mucho de la muerte de un hombre abatido, sin esperanzas ni nada que le mereciera continuar viviendo. Todo va en torno al perfeccionismo y la frustración de no poder conseguir sus objetivos. Sin embargo, para la mitad del libro ya se vuelve un poco repetitivo y tedioso. No sé si se deba a la traducción o simplemente la historia se va diluyendo. Al final, eso me dejó con un sinsabor.
La manera en que logras adentrarte en los pensamientos y a veces indescriptibles sentimientos del músico ciego es conmovedora. Puedes llegar a sentir la aflicción de sus pensamientos más melancólicos o felices.
Es un libro ameno, original y algo divertido. Me gustó mucho el hecho de que vaya intercalando detalles de la vida de algunos escritores y pensadores clásicos que también fueron hipocondriacos o con similitudes a la vida del personaje.
Es fácil sentir cierta simpatía y tal vez hasta compasión por el personaje. Si tiene momentos de humor negro, sin embargo, llega a cansar un poco y el final termina siendo la repetición de la historia o tal vez un inicio.
La curiosidad por Finlandia me llevó a este libro pero aun que es entretenido y fácil de leer, hay un punto en el que se torna repetitivo y predecible.
Las explicaciones son interesantes y logra su objetivo de ser sencillo para quienes no conocemos de cuestiones técnicas y teóricas sobre la música pero falla al ser demasiado repetitivo. El humor que intenta añadir se puede tornar un poco simple y forzado.
Esto lo primero que leo de Pessoa y definitivamente leeré más de él. De este caso, los aforismos van en torno a temas (algo) metafísicos, existencialismo y también sobre su introversión. Además, con ese lirismo es fácil sentir empatía con las ideas de Pessoa.
Rescato la intensidad en las dudas existenciales que tiene Juan Pablo pero la obsesión con María fue demasiada para mi gusto. Me dejó intrigada no conocer más de ella.
No es un libro ligero y por algunos momentos te encuentras en lagunas con extensas descripciones. Entendible si se considera que es una autobiografía o casi, porque el hilo conductor es un momento preciso y eso ayuda muchísimo a que te enganches con la entrañable historia de Karl.
El realismo mágico siempre me ha parecido algo hermoso, aunque no siempre se le haga justicia. Lo que más se disfruta de esta corriente es la sensación que te queda entre realidad y ficción en actividades cotidianas. Esta obra es de mis favoritas en ese sentido pero también por ser llamativa e inspiradora para todos aquellos habitantes y estudiosos de este tipo de espacios: las ciudades.
Lo que en un principio parece la descripción de una vida cómoda, se va desarrollando como la depresión de la protagonista hasta (prácticamente) la locura.
Empieza muy bien pero ya para el final se vuelve muy predecible y el cierre el bastante flojo. Las similitudes con la película son pocas, hay algunas referencias pero está lejos de ser una “película basada en el libro”.
Los personajes, la traducción y las ilustraciones hacen de esta historia algo muy chistoso y disfrutable para cualquiera. No hace falta leer la primera parte, además me parece que esta es mucho mejor. Ya es de mis libros infantiles favoritos.
Quedé un poco decepcionada de este libro. No sé de donde dicen que es cómico o divertido o que es la versión oriental de El Guardián entre el Centeno.
Son las vivencias de un novato maestro que tenía una juventud cómoda en Tokio y que al ser ubicado fuera de la ciudad tiene su adaptarse a la vida rural por su propia cuenta.
A pesar de que se trata de un libro muy ameno y gracioso en cierto sentido por el hecho de que todas las reseñas y comentarios son a artistas ficticios, si sería requisito estar inmerso o tener cierto conocimiento sobre crítica del arte. De lo contrario algunos capítulos podrían pasar incomprensibles.
Lo más cercano a un “slow motion” en palabras. De ahí el título y es precisamente lo que lo hizo especial <3.