Ratings2
Average rating3.5
Una historia de conspiraciones políticas e intereses encontrados durante la Guerra Fría. Una mentira que pasó por verdad y cambió el devenir de América Latina.
«¿Era la historia esa fantástica tergiversación de la realidad?»
Guatemala, 1954. El golpe militar perpetrado por Carlos Castillo Armas y auspiciado por Estados Unidos a través de la CIA derroca el gobierno de Jacobo Árbenz. Detrás de este acto violento se encuentra una mentira que pasó por verdad y que cambió el devenir de América Latina: la acusación por parte del gobierno de Eisenhower de que Árbenz alentaba la entrada del comunismo soviético en el continente.
Tiempos recios es una historia de conspiraciones internacionales e intereses encontrados, en los años de la Guerra Fría, cuyos ecos resuenan hasta la actualidad. Un suceso que involucró a varios países y en el que algunos verdugos acabaron convirtiéndose en víctimas de la misma trama que habían ayudado a construir.
En esta novela apasionante, que conecta con la aclamada La Fiesta del Chivo, Mario Vargas Llosa funde la realidad con dos ficciones: la del narrador que libremente recrea personajes y situaciones, y la diseñada por aquellos que quisieron controlar la política y la economía de un continente manipulando su historia.
Reviews with the most likes.
Una interesante vista a lo que sucedió en Guatemala.
Interesante, por partes; tiene buenos capítulos pero otros parecen de relleno. Hay algunas inconsistencias en la trama; sin embargo, sigue siendo una buena lectura.
No estoy familiarizada con la historia ni la política de Guatemala, así que no puedo decir si existe una diferencia entre lo que se enseña en los colegios y lo presentado en este libro. Lo que sí puedo juzgar es la trama de esta novela.
Debo confesar que me sorprendió el comentario final del autor en donde acepta que hay detalles que inventó para que tengan sentido con la narración. Hasta ese momento pensé que los puntos más importantes de la historia eran ciertos y que había más verdad que ficción. Lo digo como un cumplido porque cada palabra y hecho parece verosímil, y todo el mérito se lo lleva Vargas Llosa por su forma de escribir.
Pese a que, en general, disfruté la lectura, casi la mitad de los capítulos me parecieron aburridos y no pude concentrarme apropiadamente. Habían algunas inconsistencias, las cuales me llevaron a cuestionarme qué hechos debería considerar como ciertos y qué no. Es cierto que esta novela no es una crónica periodística, pero me parece que se debe tener en cuenta que no haya discrepancias en la narrativa. No obstante, este libro tiene una buena historia y creo que es recomendable para todo aquellos que quieran saber un poco más de política y relaciones internacionales.
Edición anticipada me envió una copia de este libro a cambio de mi opinión sincera.